Techos metálicos

Los techos metálicos están hechos de acero galvanizado, aluminio o cobre. Estos metales por sí solos son muy resistentes a la oxidación.

Los sistemas de techos metálicos están diseñados para durar muchos años, pero se requiere una instalación adecuada para evitar que se oxide.

Un techo de metal correctamente instalado puede ser uno de los sistemas de techado menos costosos debido a su vida útil esperada. Además, los tejados metálicos no son combustibles ni inflamables.

Son una excelente opción cuando el clima severo es una preocupación, especialmente rayos e incendios.

Los tejados metálicos pueden resistir una granizada tan bien como cualquier otro acabado de tejado, si no mejor.

Los acabados aplicados de fábrica son similares al acabado de su automóvil y son muy resistentes y cuentan con excelentes garantías.